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Manifestante huye de carabineros en Monumento a los Detenidos Desaparecidos. Manifestante huye. La policía la persigue. Está rodeada de tumbas, tumbas vacias, tumbas simbólicas, tumbas sin el silencio de los muertos. "Tumbada serás" piensa, y corre más rápido. Sus pantalones (a cuadros rojos y negros) marcan su estilo, su tendencia, son tan apretados que la entorpecen al correr, pero no los dejaría de usar, representan su derecho a pedir la justicia que todavía no se hace. "Nunca más" Dice el monumento. El carabinero que corre tras de ella tropieza, cae. Es reemplazado por otro al instante, uno que no está cansado por la persecución, uno más joven. Gira a otro pasillo, blancura de tumbas, flores nuevas. Desde el fondo otro oficial decide ir tras ella. Vuelve a girar, pasillo nuevo, adoquines en mal estado, mirando a sus perseguidores descuida los pies, tropieza, cae. Durante el tiempo que se arrastra antes de lograr pararse los carabineros se le acercan, se le acerc...

Cansado de mirar los trenes pasar asciendo. La tarde se me hace noche, las nubes se me hacen agua, las estrellas invisibles, el semáforo se torna rojo, los charcos espejos. Llueve. Llueve y el semáforo no me da la pasada. La pizzeria de la esquina es un punto de luz, a su derecha el San Cristóbal disuelve su silueta obscura en las nubes negras. Un paradero casi vacio, llueve suavecito, casi garugando, y las gotas gruesas que salpican mi pelo vienen de las cornisas, sinónimo de agua sucia, me hago a un lado esquivando una gran poza lodosa en medio de la acera. Tengo un pedazo de pan en mi bolsillo, busco un quiltro callejero para dárselo, pero están ocultos a la lluvia, esa que me está purificando. Un ciber y centro de llamadas, verde, amplio. Un pub en la esquina reemplaza a otro pub que se hizo mala fama. El estrecho y cálido café del Cine Arte Alameda, el hall del mismo, leo la cartelera sostengo la puerta. Me voy, dentro quedan una pareja y un beso. ...